El Perfil Criminal Geográfico

El hecho de intentar entender la geografía del crimen no es algo nuevo; durante mucho tiempo, los investigadores han utilizado mapas como un instrumento para representar visualmente la localización de los crímenes en diferentes áreas. La conducta criminal no se distribuye aleatoriamente, ciertas localizaciones se asocian a altas tasas de crímenes mientras que en otras sucede todo lo contrario.

¿Qué es un Perfil Criminal Geográfico?

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El perfil geográfico criminal nos da información sobre la probable zona de residencia del criminal

Cuando hablamos del perfil geográfico de un criminal estamos hablando de un sistema empírico computarizado desarrollado en Canadá por Kim Rossmo (un oficial de policía del Departamento de policía de Vancouver).

A partir de las diferentes localizaciones de los crímenes cometidos por un mismo criminal, el sistema proporciona una estimación estadística de la probable zona de residencia del criminal desconocido.

El perfil geográfico se construye después de la realización del perfil criminal, teniendo en cuenta todo lo relativo a las posibles rutas utilizadas por el criminal, los medios de transporte disponibles en las zonas de los crímenes, etc.

El principal objetivo del perfil geográfico es ayudar a  la policía a focalizar sus esfuerzos en aquellas áreas donde es más probable que se consiga la aprehensión o captura del criminal, por encontrarse cerca de su lugar de residencia.

El perfil geográfico es especialmente útil en crímenes en serie, sobre todo de naturaleza violenta o sexual.

El perfil geográfico emplea el concepto de mapa mental, representación psicológica de las áreas del crimen donde el agresor se siente seguro. Los mapas mentales no son representaciones exactas de la realidad, sino que nos muestran como un sujeto determinado percibe un área. Del mismo modo, cada criminal tiene su propio mapa mental del área donde vive y delinque, y cuando éste decide qué objetivos atacará en el futuro utilizará su mapa mental de la zona y escogerá operar en un área dentro de ciertos límites.

El mapa mental del criminal contendrá información significativa para este: información cotidiana (zonas de compra, zonas de recreo, lugar de trabajo, etc.), e información de tipo criminal (conocimiento de posibles rutas de escape, oportunidades de delinquir, zonas con poca vigilancia policial, trayectos seguidos por los transportes públicos (si este no dispone de un medio de transporte propio, etc.)).

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Los criminales tienden a escoger un área familiar para cometer sus crímenes

Los criminales tienden a escoger un área que les es familiar y donde no despertarán sospechas, normalmente una zona conocida donde llevan a cabo las actividades de la vida diaria (cerca de su hogar, trabajo, zonas de recreo, etc.).

Es poco habitual que un mismo sujeto cometa una serie de crímenes en una extensa área geográfica y que estas se distribuyan aleatoriamente lejos de su lugar de residencia; en los pocos casos donde esto se produce, invariablemente existe un buen motivo que lo explica (por ejemplo, el criminal tiene una profesión que le obliga a viajar grandes distancias, se encontraba de vacaciones lejos de su hogar, etc.).

Estudios científicos sobre el Perfil Geográfico Criminal

Canter y Larkin (1993) desarrollaron una teoría llamada Circle Theory of Environmental Range, que sugiere que es posible obtener información acerca de la zona más probable de residencia del criminal a partir del estudio de la localización de sus crímenes. Examinando la actividad espacial de 45 agresores sexuales en serie, encontraron que el 91% cometía sus crímenes en una región circular, y el 87% de ellos tenía su casa dentro de este círculo. Sin embargo, los agresores mantenían un área libre de crímenes de al menos 0.61 millas alrededor de su lugar de residencia, es decir, cometían sus crímenes cerca de su hogar pero no tan cerca como para despertar sospechas.

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Otras conclusiones del estudio fueron que los agresores de raza negra cometían sus crímenes más cerca de su hogar que los agresores blancos, y aquellos que cometieron los delitos al aire libre recorrieron una distancia 2.7 veces mayor que aquellos que lo hicieron dentro de una casa.

En 1997, Godwin y Canter descubrieron que, si englobamos dentro de un círculo todos los crímenes de un criminal, la probabilidad de que éste viva dentro del círculo es del 85%. Estos resultados fueron replicados por Koscis e Irwin (1997), en relación a violadores e incendiarios en serie.

En cambio, en referencia a los ladrones de casas, la Teoría Circular solo se cumplía en el 50% de los casos.

Diferentes estudios han concluido que la mayoría de violaciones suceden dentro de un radio de 2 millas del lugar de residencia del agresor.

Otros estudios afirman que la distancia recorrida por un criminal para cometer un crimen varía en función de la edad, el sexo y la raza de éste, por lo que pueden aportar información interesante al realizar el perfil criminal del agresor.

Por ejemplo, los violadores blancos recorren mayor distancia que los de otras razas. Los violadores menores de 20 años recorren menores distancias para cometer el crimen que los violadores entre 20 y 29 años. También recorrieron una distancia mayor los violadores que mostraron una «conducta ritualizada» en sus crímenes y los que usaron ligaduras o algún tipo de restricción física.

Haz click en los links correspondientes para informarte sobre otros métodos de perfilación criminal:

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